martes, 31 de diciembre de 2019
Otoño
El último trimestre de 2019 ha sido complicado. Perdimos con sólo dos semanas de diferencia a Ilde primero y luego a Lula. Ha sido muy duro.
Supongo que el aprendizaje es apreciar lo que es especial en nuestra vida mientras lo tenemos. No dar nada nunca por sentado e intentar que cada día sea un acontecimiento por el simple hecho de estar vivos y tener la oportunidad de demostrarlo a lo demás y a nosotros mismos.
Somos amor y tiempo. Es lo único que podemos dar y recibir. El resto importa bien poco.