sábado, 31 de diciembre de 2022

Adiós a 2022



























No me da pena despedir este año. No ha sido el mejor de mi vida pero he aprendido mucho. 

Lo dejo atrás con sabor agridulce, con algunas dudas y bastantes respuestas. Lo dejo agradecida, lo dejo con ellos de la mano y sanos. Qué más se puede pedir.

Para el año nuevo tengo las metas claras y el camino despejado, tengo ganas de hacer cosas nuevas, de retomar algunas antiguas y de cuidarme y cuidarles más y mejor. Tengo ganas, muchas, de vivir, de comenzar a escribir de nuevo, de leer, de continuar mejorando en mi trabajo y de disfrutar de la gente maravillosa que me rodea.

Gracias 2022 por tantos momentos maravillosos y por dejar que los malos me enseñen a apreciar aún más los buenos.


jueves, 29 de diciembre de 2022

La ultima cifra única

















Llevaba 365 días planeando el evento. Al menos cada dos semanas añadía o quitaba actividades, regalos, invitados... así mes tras mes, "En mi cumpleaños...". Pero cuando se acercaba el momento decidió que quería pasarlo sólo con la familia. Se acabó pensar sobre dónde, cuándo y con quién.

Un plan detallado desde por la mañana sobre qué regalos abrir antes del cole y cuales después, qué haríamos, dónde iríamos y cuál seria la cena elegida guió nuestro día. 

Me cogí vacaciones. La ocasión lo merecía. El día anterior, cuando llegué de trabajar me estaba esperando para grabar el vídeo que hacemos todos los años diciendo las ultimas palabras con 8 años y qué esperaba que iba a ocurrir en su año 9. Decoré como siempre la cocina y el salón. En la cocina un bowl lleno de las cosas que más le gustan. En el salón los regalos.

Cuando la despertamos por la mañana estaba soñolienta. Sé bien que pasó toda la noche pensando en la emoción del día siguiente, en los regalos, en las llamadas, en ser el centro de atención. Comenzó la diversión.

Bajar, abrir los regalos, ver su alegría, su sorpresa, su gratitud... De desayuno el ya clásico sandwich de Nutella. 

Luego al cole con su diadema-corona de cumpleañera y a las tres la estábamos esperando David y yo en la puerta. Sonrisas, abrazos, paseo a casa escuchándola, feliz, contar cómo había pasado el día. 

Después salir con su bici nueva, paseo con Bruma, mamá y papá, la tarta a la vuelta y cena en uno de nuestros sitios favoritos. 

A la vuelta abrazos, abrazos y más abrazos empapándonos de la emoción del momento, dejándola ir un poco más cada vez, añorando esa niñez que se va y dando la bienvenida a lo nuevo, distinto y fascinante que está por venir.

Deseando saborear la ultima cifra única de mi niña preciosa, mi fierecilla, mi pequeño pajarito hermoso.

viernes, 23 de diciembre de 2022

Otoño y la amistad




























Lo más bonito del Otoño fue sin duda la visita de mis amigas del alma, Cris y Eva. Mas de treinta años de amistad y un sinfín de momentos que han desembocado en la persona que soy, con ellas, gracias a ellas. Cris, mi primera y desde entonces mejor amiga cuando cambié de colegio, es una de las personas mas buenas y nobles que me he encontrado en la vida. Una de mis personas clave. Un refugio.

Eva llegó un poquitín mas tarde pero las charlas sublimes, nuestras mil aventuras y su bondad, su entrega, su ingenio se han quedado en mí para siempre y no importa lo que pase, el tiempo o la distancia. Ahí estaremos siempre la una para la otra. Siempre.

No pudieron venir Arancha y Égica, las que faltan del quinteto. A veces daría lo que fuera por volver a aquel nosotras adolescentes, incompletas, feroces, juntas. Mis chicas. Mi tesoro.

Tenerlas aquí, con Alber, otro grande, y Sergio, nos devolvió a todos un poco de quienes fuimos desde el somos de ahora. Un fin de semana que prometía ser legendario y que superó las expectativas. No puedo estar más agradecida.

Ojalá mis hijos tengan la suerte que he tenido yo encontrando y eligiendo mis amigos. Ojalá sepan quedarse con los buenos, dejar ir a los que solo restan. Ojalá aprendan a ser generosos y escuchar, ojalá aprendan con ellos a dar y recibir, a protegerse, a engrandecerse, a decirse las verdades con cariño. Ojalá aprendan a divertirse sin dañarse y, si se dañan, que aprendan a cuidarse y a acompañarse unos a otros. 

Ojalá logren, como yo, conservarlos.

El resto del Otoño ha sido amable y convulso a la vez. Algo incómodo, de decisiones difíciles, catártico, hermoso, bienvenido.