Cerramos agosto con un sinfín de planes por delante, deseando que las aguas vayan volviendo a su cauce y que los nuevos proyectos arraiguen con fuerza.
Siento que estamos todos renovados y que cada uno tiene por delante su propio camino y su propia misión.
Por mi parte tengo claro hacia donde dirigir mis pasos y, aunque queda un largo camino por delante, sé que llegaré a buen puerto.