sábado, 31 de agosto de 2024

El final del verano















































Cerramos agosto con un sinfín de planes por delante, deseando que las aguas vayan volviendo a su cauce y que los nuevos proyectos arraiguen con fuerza.
Siento que estamos todos renovados y que cada uno tiene por delante su propio camino y su propia misión.
Por mi parte tengo claro hacia donde dirigir mis pasos y, aunque queda un largo camino por delante,  sé que llegaré a buen puerto. 

Galicia






















































Después de unos seis años  sin pisar la tierra de David, volvimos a Galicia, esta vez al norte primero con Juan y Raquel y luego a las Rias Baixas, con la familia.

Ha sido uno de esos viajes en los que no hubiese cambiado nada. Llegaba un poco deshecha de la paliza anímica me de dio julio y como por arte de magia, a la segunda botella de albariño se me quitaron todos los males y todo fue armonía y momentos inolvidables. 

Primero con Juan y Raquel y las ya no niñas, visitando en Foz a Javi, Silvia y Ana, disfrutando de las playas más increíbles en las que he estado, comiendo y bebiendo mejor que en mi vida y disfrutando de esa Galicia desconocida, inmensa, hermosísima. 

Luego con la familia, los primos, la abuela y la energía García Díaz inundándolo todo.

Un viaje, intenso, completo y redondo. Ahora estoy preparada para lo que venga.